Me gustaria que dieseis vuestra opinión, sobre que importancia dais a la maquinaria propagandistica de los clubes de futbol y si considerais que al aficionado se le trata como a un "tonto" al que hay que engatusar.
Alfredo Relaño, director del Diario As, escribe en su magnifica columna de opinión que el Madrid no sabe vender las injusticias que se cometen en contra de sus intereses:

Domingo por la noche. Entro en El Larguero para hablar del Valencia-Madrid. Por supuesto, todos estamos de acuerdo en que el Madrid ha jugado muy mal, que no ha merecido ganar. ¡Si hasta Capello lo ha dicho! Pronto sale a relucir el agarrón de Cannavaro a Baraja. Tímidamente contrapongo que he visto un agarrón idéntico de Ayala a Diarra, y mi comentario cae en el vacío. Salen a relucir numerosas posibles segundas tarjetas a jugadores del Madrid. Nadie, ni yo mismo, habla del estrepitoso codazo de Ayala a Raúl. Por supuesto, tampoco se menciona el extravagante indulto previo a Silva.
Toca el Barça. Elogios merecidos a su juego, ninguna alusión al primer gol, penalti inventado, quinto penalti que marca Ronaldinho en esta liga. No se plantea el fuera de juego del segundo gol. Sólo hay un mensaje: el Barça es maravilloso. Recuerdo que pocos días antes me llamaron por la muerte de Puskas y salió a relucir que el Régimen le nacionalizó. Sí, dije. Como a Kubala ocho años antes, bautizado y erigido en símbolo anticomunista, con película-panfleto (Los Ases buscan la paz) incluída. Como a Kocsis y Czibor, que llegaron con Puskas. Sólo que ellos fueron al Barça. Libres de sospecha, pues.
Hace mucho que el Madrid perdió la batalla de la propaganda, a veces pienso que ante los mismos madridistas. Ahora mismo lo de Cannavaro se ve aquí como un exceso. A mí también me lo parece. Sin embargo, miro en detalle la votación y veo que ha ganado en Inglaterra, Escocia, Francia, Holanda... Ronaldinho ha ganado en España y en Islas Feroe. Hay un mundo más allá de los Pirineos en el que no existen las fobias y las filias de aquí. En el que se ve al Cannavaro del Mundial, no al de estos dos meses. Y en el que no existen esos complejos tardofranquistas que nos condicionan aquí cualquier juicio.
¿Qué Opináis?